jueves, 7 de mayo de 2009
orden de placard.
cuando ordeno el placard -cosa que me encanta-, me encuentro con remeras que no me acordaba que tenía. que no tengo claro si me gustan o no me gustan, pero que no estoy preparada para regalar. entonces se vuelven nómades y pasan a la pila de remeras para usar de camisetas, aunque no las voy a usar porque les falta alguna cualidad que deberían tener para que las use de camisetas, y la próxima vez que ordene el placard, sé que van a pasar a la pila de ropa de gimnasia, aunque sé que tampoco van a ser usadas en ese contexto. y así sucesivamente hasta llegar al lavadero y convertirse en trapo para limpiar.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Nunca te conté. Cuando estabas de viaje fuí a tu casa. Y ayudé a N a ordenar tu placard. Y vi cosas terribles.
ResponderEliminar